EL GOBIERNO DE LA RETÓRICA Y LA OPOSICIÓN MEDIOCRE

En el Valle de la Muerte cabalgaron los seiscientos. «¡Adelante, Brigada Ligera!» ¿Algún hombre desfallecido? No, aunque los soldados supieran que era un desatino. No estaban allí para replicar. No…
En el Valle de la Muerte cabalgaron los seiscientos. «¡Adelante, Brigada Ligera!» ¿Algún hombre desfallecido? No, aunque los soldados supieran que era un desatino. No estaban allí para replicar. No…