Nos correspondió vivir tiempos de tiempos de turbulencia: Colombia se enfrenta a un desafío monumental. El Presidente Petro, en su discurso diario, no cede en su empeño de atacar la libertad individual y económica, debilitar nuestra democracia y desestabilizar los mercados. Sus palabras destilan un profundo desprecio hacia los empresarios y un sesgo anti-mercado que crea una atmósfera de pánico y pesimismo alimentada por las redes sociales y la polarización.
En un momento como este, ser optimista resulta irresponsable, ya que el exceso de optimismo nos ciega ante las adversidades y nos impide detectar los riesgos inherentes; por otro lado, el pesimismo es igualmente perjudicial, pues nos impide ver las oportunidades y nos condena al fracaso, al hacernos presa de la negatividad y la desesperanza. Ante esta situación, lo que debemos adoptar es una postura que le escuché hace varios meses a un gran empresario colombiano: “debemos ser posibilistas”, lo cual, nos permite encontrar opciones en medio de la incertidumbre y la adversidad.
El posibilismo consiste en descubrir posibilidades y oportunidades, tal como un hábil piloto halla un espacio libre de nubes en el cielo para volar, o el experimentado marinero encuentra la zona de menor oleaje donde puede navegar con mayor seguridad. Para lograrlo, es crucial tener en cuenta los siguientes aspectos:
- Adoptar una mentalidad abierta y flexible: En situaciones difíciles, es vital estar dispuestos a adaptarnos y buscar soluciones creativas, en lugar de aferrarnos a nuestras creencias y expectativas preconcebidas. Menos tiempo en WhatsApp, y más en la calle viviendo y entendiendo la realidad.
- Abrazar la antifragilidad: Debemos aprender a utilizar la incertidumbre a nuestro favor, fortaleciéndonos en la adversidad y aprendiendo de los errores y desafíos que se nos presenten.
- Establecer redes: Es fundamental contar con aliados y colaboradores que compartan nuestra visión posibilista y puedan ayudarnos a superar los retos y aprovechar las oportunidades que surjan en el camino. Aléjate de los pesimistas desenfrenados que solo saben repetir que estamos muy mal.
Además, adoptar una postura posibilista significa no quedarnos de brazos cruzados esperando a que un tercero solucione nuestros problemas. Es imperativo pasar de la indignación a la acción y apoyar a instituciones como LIBERTANK, que trabajan incansablemente en el cuidado de nuestras libertades.
Asimismo, es fundamental mantenernos informados y ser críticos con las fuentes de información. En tiempos de crisis, es común que proliferen las noticias falsas y los rumores, por lo que debemos ser cuidadosos al compartir y consumir información, buscando siempre fuentes confiables y contrastando datos.
Colombia necesita, hoy más que nunca, ciudadanos comprometidos y dispuestos a luchar por la libertad y la prosperidad. La incertidumbre y la adversidad no deben paralizarnos; por el contrario, deben impulsarnos a buscar soluciones y a construir un mejor futuro para todos. Ser posibilista es asumir la responsabilidad de nuestro presente y futuro, y tener la determinación de enfrentar los desafíos con valentía y esperanza.
Es hora de unirnos y trabajar juntos para cuidar nuestra libertad y construir una Colombia próspera. ¡Levántate, actúa y sé posibilista! Depende de todos nosotros forjar un país en el que el éxito y las oportunidades sean posibles para todos.
NOTA:
La versión original de este artículo apareció por primera vez en la forma impresa del Diario La República (Colombia).