David Card irrumpió los titulares de octubre con el “prestigioso” galardón del premio Nobel de Economía, por una investigación realizada en la década de los 90’s en Nueva Jersey sobre el impacto del aumento del salario mínimo, donde en un sector económico de comidas rápidas se evidenció que aumentar el precio mínimo fijado por el gobierno estatal no causó desempleo; escenario que rápidamente fue tomado de manera peligrosamente simplista para exhibirlo como una generalidad a implementar en cualquier lugar del mundo, a tal punto de consagrarlo como el más “laureado” reconocimiento a nivel mundial en la materia.
TAMBIÉN LE PUEDE INTERESAR:
“Aumento del salario mínimo: una discusión «irreal»”, por Kevin Pacheco Del Castillo para El Bastión.
EL AUMENTO ARTIFICIAL DEL SALARIO MÍNIMO
Al respecto, BBC News (Fuente AQUÍ) expresó lo siguiente:
La forma como el autor de la nota periodística, del que es uno de los más importantes portales de noticias del mundo, claramente nos lleva a la conclusión que antes de la investigación del Dr. Card, el aumento artificial (sin intervención espontánea del mercado) del salario mínimo siempre conducía a la destrucción de empleo –debido a que este representa en muchos escenarios el más grande costo de los bienes y servicios que consumimos. Luego del valioso aporte científico del Nobel, se tiene el descubrimiento de una excepción a lo que es una regla general.
Por su parte, el reconocido economista Juan Ramón Rallo en su canal oficial de YouTube (Enlace AQUÍ) realizó diferentes comentarios. Al respecto, destacó los dos más importantes:
- La investigación analiza un sector económico específico del expendio de comidas rápidas en 1992, en una región delimitada de los Estados Unidos.
- El Comité del Nobel premia la metodología del método empírico y no resalta que la subida del salario mínimo no cause efectos adversos sobre el empleo.
En su lugar, el doctor en economía español, trae a escena el ejemplo de su país, donde en un estadio del Banco Central con el uso del método promovido por David Card (entre otros), concluye que la subida del salario mínimo destruyó 170.000 empleos (Fuente AQUÍ).
VOUCHER ESCOLAR: SIN INTERÉS PARA EL NOBEL
David Card obtuvo su galardón en conjunto con Joshua Angrist y Guido Imbens, quienes tuvieron preponderantes aportes en el uso de métodos empíricos; Angrist, quién se sitúa en un segundo plano del reconocimiento, generó un importante paper que demuestra la eficiencia del uso del voucher escolar versus la educación estatizada (Fuente AQUÍ).
En el paper se habla específicamente del caso colombiano, donde destacan las falencias del sistema público con pérdidas en las horas de clases recibidas por los estudiantes, y el costo superior que significa para el Estado colombiano crear y financiar un colegio público, por lo que enfatiza las virtudes de subsidiar la demanda sobre la oferta más allá del ahorro en costos: el aumento de la calidad educativa producto de la competencia libre. El estudio económico se realizó con base en el Programa de Ampliación de Cobertura de Educación Secundaria (PACES), que tuvo una población de muestra de 125.000 estudiantes, caso por el cual la Federación Colombiana de Educadores (FECODE) jamás se ha pronunciado, sindicato de educadores que dice velar por el mejoramiento de la educación escolar y que a la presente fecha, tiene privados a los niños y adolescentes del país de recibir clases presenciales en un entorno donde el virus COVID-19 está controlado, esto, producto de un sobresaliente proceso de vacunación nacional.
PALABRAS FINALES
El Comité del Nobel le ha demostrado al mundo su alto nivel de politización, al darle casi el mismo trato de la escogencia de un Nobel de Paz al “respetable” Nobel de Economía, con intenciones claras, de quienes lo financian, de exponer agenda política global con unos postulados económicos sin una contrastación clara de la idea sobre los resultados que genera. Adicional, deja en evidencia su selección conveniente de aquellos papers a resaltar de los galardonados, donde en un primer plano se subraya un polémico estudio sobre el aumento del salario mínimo, y por el otro, se hace una nula mención respecto del caso estudio del efecto del voucher escolar en un país latinoamericano, teniendo en cuenta que se siguieron metodologías empíricas en ambos escenarios.